Los pequeños ingenios, en su mayoría eran propiedad de cubanos. Para asegurar su existencia y mantenerlos como fuente de trabajo, contribuyendo con ello a la seguridad económica de los habitantes de las entidades municipales en las que radicaban. Tambien favoreció la consolidación de parte de la clase media superior cubana, que tal mal pagaría al Autenticismo.

Cuota de los Pequeños Ingenios

Gaceta Oficial, Habana, 30 de diciembre de 1933

PODER EJECUTIVO
PRESIDENCIA
SECRETARÍA DE AGRICULTURA Y COMERCIO

Decreto Nº 3278

Cuarto: Establecer dos categorías de ingenios a los efectos de la asignación de la cuota de producción,

(a) Ingenios libres, los que en la pasada zafra de 1933 tuvierron cuota no mayor de 60,000 sacos; podrán moler libremente en la zafra de 1934, sin sujeción de cuota, hasta la cantidad de 60,000 sacos, y traspasar sin limitación la caña de su propiedad.

La producción total de los ingenios libres no excederá al aumento que sobre el monto total de la zafra pasada autoriza este Decreto para la zafra de 1934 en el Artículo Segundo (2,315,459 ton de 2,240 libras), porque aún cuando todos elaboraran al máximo autorizado, siempre será su producción inferior a dicho aumento.

Dado en Palacio, en la Habana, a los veinte y nueve dias del mes de diciembre de mil novecientos treinta y tres.

Ramón Grau San Martín Presidente

Carlos Hevia
Secretario de Agricultura y Comercio

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