Ricardo Olmedo

RICARDO OLMEDO

Por José A. Adán

"Ricardo Olmedo", dijo el hombre "Ricardito", le contesté- "Lo conocí bien. Fué un revolucionario entero. Desde jovencito fue muy activo en la lucha por la vigencia del ideario democrático del pueblo cubano. Primero contra Machado, luego contra Batista en sus dos tiranías. Fué uno de los participantes en el ataque al Palacio Presidencial para ejecutar a Batista, el 13 de marzo de 1957."

"Sin embargo," replicó el hombre- Fidel lo fusiló el 13 de marzo de 1963." "Cierto- asentí- Fidel lo fusiló, y, también, fue el último revolucionario fusilado por los sicarios fidelista."

"Sí, eso también es cierto.¿Por que fue así.?"- Preguntó.

"Le voy a contar lo que pasó entre Ricardito y Fidel. Lo sé porque uno de los acompañantes de Fidel, presente en la entrevista, era amigo y compañero de lucha contra la tiranía de Batista."

"Ricardito estaba detenido en Villa Marista, en La Víbora. La Seguridad del Estado había descubierto un complot para ejecutar a Fidel Castro durante la conmemoración del Asalto a Palacio el 13 de Marzo de 1957. La Seguridad tenía información de que el atentado se realizaría utilizando una bazooka, y que Ricardo Olmedo era la única persona que conocía donde estaba ésta. A pesar de todos los métodos aplicados para obtener la información, Ricardito no confesó."

"Por tratarse de un revolucionario, Fidel tenía especial interés en el caso. Ya había fusilado a Eufemio Fernández Ortega, lo que le había enajenado la amistad de Lázaro Cárdenas y otros líderes de la Social Democracia de América. Para Fidel esto era peligroso. Si fusilaba a todos los revolucionarios que discreparan de él, llegaría un momento en que sería prisionero de los agentes moscovitas. Y eso, para él, era intolerable. Por ello ordenó a la Seguridad del Estado que en todo causa incoada por actividades contrarevolucionarias en la que estuvise complicado un revolucionario se le mantuviese informado, y que no se tomara decisión sobre el caso sin consultarlo. No quería que se repitiera el caso de Eufemio; el "Che" se lo fusiló después que Lázaro Cárdenas intercediera por él.".

"Cuándo Fidel conoció de la postura de Ricardito fue a verlo. Él, sus acompañantes y Ricardito almorzaron. Espléndido almuerzo, como todas las comidas de Fidel, abundancia de manjares y buenos vinos. Ricardito almorzó, pero no tomó vino.

Óyeme, Ricardito -dijo Fidel- Si me entregas la bazooka te salvo la vida. Te condenarán a unos años de prisión, pero a los pocos meses te pongo en libertad y te mando a dirigir una granja."

"Que bien se ve que no me conoces, Fidel. -respondíó Ricardito- No te diré nada. Mientras esa bazooka esté fuera de tus manos, allá en tu subconsciencia alumbrara la inquietud de que alguien te está cazando. Si te detuvieras a pensar sobre el porqué de nuestras acciones y rectificaras te evitarías muchos problemas, y hasta los "cazadores" te dejarían en paz."

«Yo soy el que manda Ricardito, -le interrumpió Fidel y continuó- Es a mi a quien el pueblo venera. Todos ustedes se han equivocado con este pueblo. Aquí nadie está interesado en el progreso del país ni en los derechos de la gente. ¿Acaso no viste, después del Asalto a Palacio, como la gente corrió a testificar su apoyo a Batista. No reparaste en ver a los plutócratas metiéndole por los ojos sus mujeres a Batista. O es que no te dijo nada aquella guaracha de Servando Diaz "Se formó la cambiadera". Este es un pueblo de mierda, dos veces ha aplaudido a la tiranía de Batista. Por que ustedes, revolucionarios de larga historia se van a poner al lado de los que nada se merecen. Nada te dice que la mayoría de los integrantes de los Comités de Defensa de la Revolución es batistera. Yo me cumplo a mi mismo, Ricardito. Tu no lo verás, porque morirás mañana.¡Que ironía, mañana será 13 de marzo!»

«Fidel,- le interrumpió Ricardito- Tu solo te amas a ti, ni a Raúl quieres. Eres inteligente y sabes que necesitas de la gente para lograr tus fines, por eso los toleras. Si no fueras tan vanidoso podrías hacer la revolución más linda del mundo, frente a todos los imperialismos y a favor de los cubanos. Pero tu no eres diferente a Batista, por eso te entiendes tambien con los comunistas, igual que Batista, sólo te diferencias de él en que tu amas más al poder que al dinero.»

«Coño -le interumpió Fidel- No me compares con ese negro de mierda.» Fidel -continuó Ricardito- lo dicho, dicho queda. Me fusilarás, pero piensa que cada vez que fusiles a un revolucionario te encontrarás con la repulsa del mundo, de la gente que vale. Sé que moriré mañana. Pudo haber sido diferente de no haber sido delatado. Pierdo la vida, pero contento de no haberme traicionado ni de haber traicionado a nadie." -Y dirigiendóse a Fidel le dijo: "Vete." -Volviéndose hacia uno de los escoltas le dijo: «Llama a la Seguridad para que me conduzcan a mi celda.»

Fidel, sacudiendo la cabeza se marchó. Ricardito salió del comedor custodiado por los agentes de la Seguridad. Una hora más tarde estaba frente al Tribunal Revolucionario No.1, en la fortaleza de La Cabaña. Fué sentenciado a muerte. La sentencia se cumplió en al madrugada del 13 de Marzo de 1963.

«Como ve,» -le dije al hombre- «Ricardito Olmedo prefirió morir antes de traicionarse y delatarnos, y más que eso, le demostró a Fidel que los que luchan contra él saben que arriesgan la vida, que están conscientes del peligro. No son anormales ni creen en su clemencia. La lucha es a muerte, él o nosotros.»

Ricardo Olmedo fué miembro fundador del Partido Revolucionario Auténtico PRC (A) y miembro de la Organización Auténtica O/A.

FIN

José A. Adán

Miami, FL
Marzo de 1970

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