Cuba, España y los Estados Unidos | Organización Auténtica | Política Exterior de la O/A | Temas Auténticos | Líderes Auténticos | Figuras del Autenticismo | Símbolos de la Patria | Nuestros Próceres | Martirologio |
Presidio Político de Cuba Comunista | Costumbres Comunistas | Temática Cubana | Brigada 2506 | La Iglesia | Cuba y el Terrorismo | Cuba - Inteligencia y Espionaje | Cuba y Venezuela | Clandestinidad | United States Politics | Honduras vs. Marxismo | Bibliografía | Puentes Electrónicos |
El señor, hijos amadísimos
de la República de Cuba, les ha regalado una patria, hermosa como un jardín
espléndido anclado en un mar encantador, donde el cielo siempre es azul,
donde la tierra, casi espontáneamente, brinda entre sonrisas sus frutos
dulces y aromáticos.
Los que venís de las
colinas de Pinar del Río, o de la llanura de Colón, lo mismo que los llegados
de la sábana de Santi Spiritus o de la planicie serena de Camagüey, o de los
altos picos de Oriente, todos os sentís orgullosos de haber vista la luz -
como alguien felizmente dijo - «en la tierra más hermosa que ojos humanos
vieron» y dais gracias a Dios porque os hizo hijos de la Perla de las
Antillas.
Pero precisamente en
esta placidez y suavidad del fácil vivir, en esta perenne y casi irresistible
sugestión de una naturaleza luminosa y exuberante, en esta prosperidad alegre
y confiada se esconde, acaso, el enemigo. Por el tronco airoso de vuestra
palma real, que el suave soplo de la brisa hace cabecear airosamente, nos
parece ver que, perezosamente se desliza la serpiente tentadora: «¿Por qué no
coméis?... - os dice -; seréis como dioses»
Y si todo el
esplendor de esta poderosa atracción puramente natural no se compensara con
una vida sobrenatural potente y robusta, la derrota sería cierta.
Corred, amados hijos,
a este místico banquete, a este eterno sacrificio, a este perpetuo «Dios en
medio vuestro», si no queréis veros hundir por la oleada de materialismo, si
deseáis no ver ahogada vuestra palma real entre la mala hierba, bajo los
cardos y las espinas.
Cuba es la tierra de la Madre de Dios, porque sobre ella reina como patrona, desde hace casi medio siglo, Nuestra Señora de la Caridad del Cobre; Cuba fue la liza de aquel varón apostólico, el Beato Antonio María Claret, que consagró su obra principal al Inmaculado Corazón de Maria, dejando este título como estandarte de victoria a sus celosos hijos. Que por su intercesión y por las oraciones y las enseñanzas de este Congreso, el Dios Eucarístico os conceda veros libres de la plaga universal; pues aunque los efectos del materialismo neo-pagano han mostrado con macabra elocuencia al mundo de qué cosa es capaz el hombre cuando piensa que solamente es materia, sin embargo, estamos por desgracia, bien lejos de tener la impresión de que la lección haya sido aprovechada y nos embarga el temor de que a un materialismo no quiera suceder otro, no menos fatal y pernicioso.
Cuba, España y los Estados Unidos | Organización Auténtica | Política Exterior de la O/A | Temas Auténticos | Líderes Auténticos | Figuras del Autenticismo | Símbolos de la Patria | Nuestros Próceres | Martirologio |
Presidio Político de Cuba Comunista | Costumbres Comunistas | Temática Cubana | Brigada 2506 | La Iglesia | Cuba y el Terrorismo | Cuba - Inteligencia y Espionaje | Cuba y Venezuela | Clandestinidad | United States Politics | Honduras vs. Marxismo | Bibliografía | Puentes Electrónicos |
Organización Auténtica